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Wednesday, 5 August 2020

Un Diseñador En El Paraiso

El diseño para la recreación, el turismo y la experiencia. Es el tema hoy de Raúl Guarderas desde su laboratorio creativo en la falda del Atacazo en Ecuador.

Quien es Raul Gualderas:

 Diseñador industrial ecuatoriano, con más de 25 años de experiencia, iniciados nada menos que en la legendaria Olivetti, donde trabajó como asistente del diseñador de Ulm, Hans Von Klier tras estudiar en el Politécnico de Milán, en cierto momento  de su vida en Italia conoce a quien fuera su principal maestro: el diseñador AG Fronzoni, con quien hizo un programa de Museografía y Montajes Efímeros. En esa relación retomó una tradición que ya traía de su país, por el diseño para el teatro -que viene de familia- y el campo donde se crió. La posada de Raúl al fondo el volcán Cotopaxi.

Su carrera:



En el Instagram de Sierra Alisos, se identifican los diseños de Raúl en su posada
Tras retornar a Ecuador en el año 91, trabajó con las empresas más importantes de la escena industrial de su país con productos que aún siguen en producción, especialmente en una empresa icónica ecuatoriana de muebles de oficina: ATU, donde conformó un equipo con los otros dos más destacados diseñadores de su generación: Rodney Verdezoto y Mario Arias, en un sensacional equipo de trabajo donde los acompañaban  grupos satélites conformados por ingenieros y dibujantes que llevaban a la realidad complejos diseños en cuestión de semanas.  En pocos meses reformaron el portafolio de la empresa, sus diseños tienen mucho que ver con el éxito y crecimiento de la misma y llegaron a ser exportados. No sabía entonces que una de las visitas comerciales a la empresa Vitra en su Museo del Diseño, en un entorno rural campestre, sería fuente de inspiración para el emprendimiento que ilustran las imágenes.
La cocina de Villa Alisos
Siguieron algunos años con su empresa, inicialmente en la buhardilla de la vieja casona familiar convertida en restaurante y centro cultural alrededor del teatro. Allí diseñaba y hacía escenografías, mientras atendía sus clientes externos, también como diseñador independiente escondido detrás de la marca Morf. Sin embargo, de ese periodo surgieron creaciones para empresas de varias índoles, como Edesa/Briggs, Hogar2000, Magnaforma, Renacenthal, pero también creaciones de espacios interiores referenciales en Ecuador, el caso del Museo Interactivo de Ciencia. 

En estos últimos años ha estado bastante vinculado en los procesos de gestión gremial en el sector empresarial lo que lo llevó a  hacer parte del equipo gestor y posteriormente director del Centro Ecuatoriano de Diseño. Pero ahora ha vuelto al campo a hacer el diseño soñado: La creación y gestión de una posada campestre desde donde lidera todo un emprendimiento turístico desde lo local apoyado y apoyándose en una región de enorme potencial.


En la acogedora sala del lugar, también una mesa de Raúl hecha con materiales reciclados, el diseño interior obviamente también es de su autoría.

Diseño en el turismo

 La "industria sin chimeneas", ha tomado un nuevo auge y es una fuente de oportunidades inmensas para aquellos que con mentalidad creativa proyectan desde la concepción de lugares, eventos y oferta para los turistas. Posadas con temáticas locales muy inspiradas en lo local se organizan con personajes de la región para ofrecer otros servicios, como paseos, experiencias en la granja, culinaria con sabores locales y artesanía de recuerdo. Todo un paquete que implica el montaje de un complejo sistema que involucra un montón de gente de la comunidad, con la que Sierra Alisos se ha ido involucrando.

Sierra Alisos está tiene un clima medio templado y está situada a casi una hora de Quito[/caption] Ese es hoy el tema de Raúl, su estudio es un valle rodeado de montañas donde ocasionalmente recibe la visita incluso de osos de anteojos, pero a diario infinidad de pájaros, al fondo, el volcán Cotopaxi, uno de los puntos más lejanos al centro de la Tierra. Es en este lugar llamado Tambillo donde está su posada Sierra Alisos
 El proyecto retoma la tradición de la arquitectura vernácula en tapia pisada de origen colonial,  y un taller donde Raúl explora su material favorito, el Bambú Guadua del que ya se ven algunas construcciones dentro de su espacio. A partir de la ampliación de una casa rural existente  y aprovechando la abundancia de este material natural en la región, el negocio se ha ido expandiendo a partir de sus diseños donde prima la calidez y practicidad.

Hacia un evento sobre diseño en el turismo


 La experiencia alucinante de Raúl lo hace pensar en la idea ya en marcha de organizar talleres y experiencias inmersivas para diseñadores y emprendedores  sobre el tema del viaje y el descubrimiento personal de habilidades a partir de su finca como cuartel general,  explorando toda la región y sus diversos pisos térmicos y regiones con diversas características y culturas en materiales. La posada Sierra Alisos, deberá ser la primera sede del congreso latinoamericano de diseño para el turismo, que se está programando para final del 2018.

En este salón en guadua, diseñador y fabricado por el, Raúl sueña con hacer en equipo, diseño para el turismo. El próximo año estaremos allí probablemente[/caption] Pero no deja en absoluto su faceta de diseñador industrial, siendo crítico con el tejido industrial ecuatoriano, sigue trabajando ahora con madera, bambú guadua, materiales de fácil consecución en la región y con los cuales ha ampliado su posada haciendo -entre otros- una sala múltiple donde ya sueña en cursos y talleres alrededor del inagotable tema del diseño para el turismo, vocación del Ecuador y muchos otros países sudamericanos. Ya planea una torre de observación en bambú que con el apoyo de una universidades y organismos de la región y con diseño de estudiantes voluntarios, planea ejecutar en breve en metodología de taller. Muy en breve, Lacod estará informando  de eventos y talleres en el lugar paradisíaco que Raúl Guarderas tiene como lugar de trabajo.  

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